Dejando atrás el 2024, un año marcado por retos climáticos y fluctuaciones en los mercados internacionales, el nuevo ciclo 2025 se perfila como una oportunidad para consolidar avances, innovar y seguir posicionando al agro como motor fundamental de nuestra economía.
Un sector agropecuario que año tras año se transforma y en el cual la clave es el desafío de adaptarse a las tendencias globales en materia de sostenibilidad y tecnología.
El mundo demanda productos agropecuarios con trazabilidad y menor huella ambiental, y Paraguay no puede quedarse atrás.
Es imperativo avanzar hacia prácticas sostenibles que garanticen productos de calidad y, al mismo tiempo, la preservación de nuestros recursos naturales.
En paralelo, tener una mirada sobre un agro diferente, con nuevos rubros, con combinación de esquemas productivos y, como siempre dijimos, con las “luces largas”. Hoy la forestación ya empieza a ser una realidad, la agricultura está consolidada y la ganadería tiene desafíos que, si se combinan con los dos anteriores, seguramente mejorará su ecuación.
El 2025 nos invita a mirar hacia adelante con optimismo. El agro paraguayo tiene la capacidad de superar los desafíos y reafirmarse como un sector estratégico para el desarrollo del país. Es el momento de actuar con compromiso y trabajar juntos por un futuro más próspero y sostenible para todos, en algo que siempre hemos mencionado… “hacer lo que nos toca” y no dar mucha vuelta, sobre todo aquello que no podemos cambiar.
¡Que este nuevo ciclo sea de éxitos para todos los que forman parte de la gran familia agropecuaria del Paraguay! A paso firme que un futuro nos espera.
Por Ing. Agr. Rodrigo Artagaveytia
Boletín Nº59
Tendencias en los mercados ganaderos en Paraguay, el Mercosur y el mundo
Enero de 2025 – Publicación de Everdem y Tardáguila Agromercados
Diciembre fue un mes de bruscas oscilaciones en los precios de los animales a faena. La industria redujo su actividad en la segunda mitad del mes y eso llevó a que se dieran bajas considerables durante la primera mitad. La salida de equipos kosher por las fiestas de fin de año, sumado a que también se aquieta la demanda chilena, redujeron el interés comprador. Sin embargo, al programar las compras para el regreso a la actividad, los precios subieron fuerte hacia fin de año y comenzaron 2025 en máximos en casi un año.
La actividad en el mercado de la reposición fue reducida en diciembre y se concentró fundamentalmente en la primera mitad del mes. Parte de la demanda ya había concretado sus compras y se mantuvo al margen del mercado, lo que impactó en un menor porcentaje de ventas, a pesar de la reducción de la oferta. La úncia categoría que sigue demandada y con productores que mantienen el interés comprador es la de machos carimbo 4. La drástica baja en los precios del gordo hasta mediados de mes también influyó en el menor ánimo comprador.
El precio medio de los terneros corrigió a la baja en diciembre, con una referencia de G$ 14.500 por kilo para los de más de 180 kilos y de G$ 15.200 para los más livianos. De todas maneras, la caída fue menor a la del ganado a faena, que promedió unos US$ 20-25 centavos menos por kilo carcasa que en el mes anterior, por lo que la relación de reposición mantuvo la tendencia de mejora y cerró el año en el nivel más alto desde junio.
Mercado internacional de la carne vacuna
El tono del mercado internacional de la carne vacuna cambió desde fin de noviembre. Superadas las dos ferias internacionales (París en octubre y la CIIE en Shanghái en noviembre), cuando se dieron fuertes ajustes al alza en los precios de venta a China, la demanda se contrajo de forma significativa. Siempre sucede lo mismo en ese momento del año, ya que lo que se negocia desde América del Sur no llega para las fiestas del Año Nuevo chino sobre fines de enero, que es el momento pico de la demanda. Este año las bajas fueron importantes, aunque de todas formas los precios se ubican por encima de los valores de mediados de año. Como referencia, el delantero en 8 cortes que exporta Brasil a China se vendía a US$/t 4.000-4.200 a principios de julio, alcanzó un pico de US$/t 5.500-5.700 en la segunda quincena de noviembre y bajó a unos US$/t 4.700 a fin de año. La drástica corrección a la baja en los precios de la hacienda en Brasil, potenciada por la debilidad de la moneda brasileña —que mejora la competitividad de los exportadores— permitió a los brasileños aceptar precios más bajos sin perder margen en el negocio.
En otros mercado, Estados Unidos terminó el año con un mercado con escasa operativa, a la espera de que en los primeros días de enero ingrese una cantidad muy importante de carne que estará completando rápidamente la cuota con arancel de 0% para terceros países, utilizada fundamentalmente por Brasil y de la que también participa Paraguay. De todas formas, la expectativa es que en 2025 se vuelva a operar de forma fluida por fuera de cuota, pagando el arancel de 26,4%.
En el útimo mes, lo más importante en lo que a precios de ganado en el mundo refiere fue la drástica corrección a la baja de las referencias brsileñas. El «boi gordo», que había alcanzado un pico de US$ 3,73 el kilo carcasa en el promedio de los principales estados exportadores (excluyendo el impuesto Funrural) a fines de noviembre, bajó a US$ 3,20 a fin de año, un descenso de 14%. En las últimas semanas del año lo acompañó Argentina, con una caída del precio del novillo de exportación de 7% a US$ 4,24 el kilo (incluyendo el impuesto de 6,75% de la exportación de carne).
Agricultura
Se inicia la cosecha de soja en línea con lo esperado
Las lluvias irregulares en la Región Oriental permitieron mantener nuevamente la estimación en 9,25 millones de toneladas para la zafra principal 2024/25. Si bien existían preocupaciones respecto al desarrollo en el Norte, los buenos niveles pluviométricos vistos en algunas regiones permitieron la recuperación en áreas críticas, lo que terminó contrarrestando las pérdidas en otras zonas. Por su parte, en el Sur las plantaciones continuaron un desarrollo considerado cercano a lo óptimo, lo que también permite mantener la productividad esperada.
Con el avance de la cosecha, aún se siguen esperando 1,2 millones de toneladas para el ciclo complementario, sumando así la producción total 10,52 millones de toneladas para el ciclo 2024/25, con ambos ciclos de plantío.
Respecto a la comercialización, no se vieron grandes avances en diciembre; la zafra 23/24 se encuentra prácticamente vendida, mientras que se vendió poco más de 20% de la nueva zafra 24/25.
Con relación a las exportaciones, un punto llamativo fue que, hasta noviembre la zafra 2023/24 fue récord en comparación a las demás campañas, una vez que se exportó más del 50% en comparación a los últimos años. En contrapartida, si bien aún deben publicarse las cifras oficiales locales de procesamiento, se estima que la molienda fue la más baja de los últimos cinco años, fundamentalmente por los precios competitivos de las industrias procesadoras argentinas. En cuanto a precios, el basis presentó mayores descuentos, siguiendo lo registrado en Brasil que también espera una buena zafra. En la primera semana de enero se registra un costo de -50 US$/t en Asunción. Ya en Chicago, el inicio del 2025 es estable, con los contratos a enero/25 registrando 981 cents/bu, mientras que marzo/25 cotiza a 991,75 cents/bu.
En síntesis:
• Si bien se registran pérdidas en algunas regiones, las buenas lluvias permitieron a otras zonas recuperarse en localidades de San Pedro, Concepción, Amambay y el norte del Alto Paraná, por lo que no espera un quiebre;
• A su vez, tanto el sur del Alto Paraná, como Itapúa y Caaguazú, están iniciando la cosecha con resultados dentro del promedio esperado, pero sin registrar un récord máximo, ya que los milímetros registrados fueron inferiores a la zafra anterior;
• Las regiones del sur de la Región Oriental, principalmente del Alto Paraná e Itapúa, presentan las mejores condiciones: las últimas lluvias ayudarán a aumentar la productividad promedio. Los cultivos en toda la región están en muy buen estado.
• Un punto de atención es que se observan altas temperaturas y no se esperan lluvias para los próximos días, lo que podría llegar a afectar la terminación de las plantaciones realizadas de forma más tardía. Siendo así, a partir de la segunda quincena de enero, cuando se inicie la cosecha de forma masiva, se podrán observar de manera más ajustada los valores.
Autora: PhD. Larissa Barboza Alvarez, analista senior de Inteligencia de Mercado en StoneX.
Fuente y elaboración:
Forestación
Funcionarios del INFONA fueron capacitados en incendios forestales
Con el apoyo de la Oficina de Programas Internacionales del Servicio Forestal de los Estados Unidos (USFS) y de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), en noviembre y diciembre organizaciones del sector, funcionarios del Instituto Forestal Nacional (INFONA) y otras instituciones participaron de cursos orientados al manejo de incendios forestales en Paraguay.
Los cursos fueron impartidos por el USFS, abarcando los siguientes temas:
- S-190: Introducción al Comportamiento de Incendios Forestales
- L-180: Factores Humanos en el Servicio de Incendios Forestales
- S-130: Capacitación de Combatiente de Incendios, y
- M-410: Instructor Facilitador.
El objetivo fue proporcionar conocimientos básicos a los combatientes forestales para el control y supresión de incendios forestales, al tiempo de brindar herramientas esenciales para enfrentar situaciones de emergencia relacionadas con el fuego en áreas naturales.
En el caso del Curso M-410: Instructor Facilitador, la finalidad fue mejorar las capacidades de instrucción y enseñanza de los participantes a través de la presentación de métodos de instrucción.
Durante las capacitaciones se contó con la participación de personal técnico del INFONA. Quienes participaron fueron Luis Marecos, Diego Ramírez y Pedro López, de la Dirección General de Oficinas Regionales; Jorge González de la Dirección General de Educación y Extensión Forestal; Andrea Fleitas, de la Dirección de Planificación y Raquel Acuña, de la Dirección de Relaciones Internacionales.
Según el INFONA, esta colaboración interinstitucional y la formación especializada de los participantes constituyen pasos fundamentales para fortalecer las capacidades nacionales en la gestión integral del manejo del fuego.
Análisis – Por Ing. Agr. Rafael Tardáguila
Un año con menos carne
El año 2024 fue bueno para los precios internacionales de la carne vacuna, al evolucionar de menos a más, y la expectativa es que el promedio del precio del producto en 2025 se ubique un escalón por encima.
La razón es que habrá menos carne. Como todo bien, cuando hay menos, tiende a valer más. Las proyecciones del Departamento de Agricultura de Estados Unidos son de una reducción en la producción de carne de unas 500 mil toneladas este año, con la particularidad de que el grueso del descenso se estará dando en dos de los tres principales exportadores mundiales del producto, Estados Unidos y Brasil.
El mayor descenso se dará en Estados Unidos, donde la balanza comercial del producto se proyecta deficitaria en 828 mil toneladas carcasa, el más alto desde la crisis de la vaca loca a principios de siglo. Por lo tanto, es un hecho que la avidez por carne vacuna de la principal potencia mundial este año será tan o más importante que en 2024, intentándole quitar a China una porción creciente del volumen vía mayor precio. Una de las interrogantes en el mercado está justamente en Estados Unidos con la segunda Presidencia de Donald Trump, quien amenaza con subas generalizadas de aranceles que pueden quitarles competitividad a los productos importados, con el consecuente impacto negativo sobre los precios que los consumidores estadounidenses deberán pagar por el producto.
Este eventual aumento de los precios en Estados Unidos es una amenaza en la lucha para bajar la inflación en ese país, lo que derivaría en expectativas de menores ajustes a la baja de la tasa de interés por parte de la Reserva Federal de EEUU y, por lo tanto, con un impulso al alza en la cotización del dólar. Un dólar fuerte tiende a deprimir los precios de las materias primas que se comercian en esta moneda en el mercado internacional.
Pero también habrá menos carne en Brasil. Se prevén unas 100 mil toneladas menos que el récord de 2024. De todas formas, esto no tiene porqué significar un descenso de los volúmenes colocados en el mercado internacional, dado que los problemas de la economía brasileña y la debilidad del tipo de cambio debilitan la demanda del mercado interno, lo que hará que una mayor proporción de la producción quede disponible para ser colocada en los mercados del exterior.
Australia, el otro que integra el podio de los exportadores, se supone que seguirá teniendo una elevada producción este año, al menos en la primera mitad. Ya para el segundo semestre del año hay analistas de ese país que sostienen que la producción comenzará a mermar.
Por lo tanto, en especial en el segundo semestre, se podría dar la particularidad de que los tres principales exportadores mundiales estén atravesando una fase de reducción de su producción de carne, con el consecuente impacto en la disponibilidad del producto y, en definitiva, con presión al alza en sus precios.
Claro que, desde el punto de vista de la demanda, las amenazas no son pocas en este mundo; primero que nada, las guerras, tanto en el este europeo como en Oriente Medio, y también las complicaciones en economías claves para la demanda por carne vacuna, caso de China. La potencia asiática no termina de solucionar su crisis inmobiliaria. Además, 2024 terminó con una amenaza adicional en China, tras el pedido de los productores ganaderos de ese país de limitar las importaciones de carne vacuna, por el impacto negativo que estas han tenido sobre los precios del producto en el mercado interno. El gobierno anunció que estudiará la situación. Parece difícil que avance en una restricción significativa de la corriente importadora, pero quizás alguna medida pueda tomar, por ejemplo, dejar de habilitar nuevos proveedores.
Más allá de estas amenazas, en condiciones de demanda dentro de parámetros de normalidad, la menor producción debería determinar una suba en el precio del producto.
